JESUS ES EL REGALO

Saldrá una vara del tronco de Isaí, y un vástago retoñará de sus raíces.

2 Y reposará sobre él el Espíritu de Jehová; espíritu de sabiduría y de inteligencia, espíritu de consejo y de poder, espíritu de conocimiento y de temor de Jehová.

3 Y le hará entender diligente en el temor de Jehová. No juzgará según la vista de sus ojos, ni argüirá por lo que oigan sus oídos;

4 sino que juzgará con justicia a los pobres, y argüirá con equidad por los mansos de la tierra; y herirá la tierra con la vara de su boca, y con el espíritu de sus labios matará al impío.

5 Y será la justicia cinto de sus lomos, y la fidelidad ceñidor de su cintura. (Isaías 11:1-5)

La salvación es de nuestro  Dios.  El vio al hombre en su locura, sometido por el pecado y cosechando frutos de injusticia y proveyó a Jesús para que cualquiera que volteara a Él y le recibiera encontrara salud y vida.

Religiones, sistemas políticos, planteamientos económicos, formas novedosas de encontrar satisfacción y nuevas estructuras sociales han sido los caminos que el hombre ha propuesto para intentar vivir y vivir bien.  Hemos intentado salir del laberinto  por medio de nuestras propias fuerzas y lo único que hemos conseguido, es enfermarnos, oprimirnos unos a otros y construir una sociedad que se violenta con tal de conseguir una sonrisa que dure unos segundos.  Sin embargo la respuesta siempre ha estado ahí.  Desde el madero del Gólgota Dios dio la solución en su hijo Jesús y exhibió a los responsables de tanto dolor con que el hombre vive, pero a pesar de ello, hemos persistido en nuestra necedad y seguimos buscando un camino que no pase por la verdad de Dios y aunque no lo hay, fingimos que algún día lo encontraremos.

Jesús es el regalo de Dios para todos nosotros.  Solo en Él encontraremos libertas, salud, bienestar y vida eterna.  Dejemos de golpearnos contra el aguijón y recibamos el regalo de Dios para vivir en paz en esta tierra y disfrutar la eternidad  su lado.