ROCA ETERNA

 

Sé tú mi roca de seguridad,
    donde siempre pueda esconderme.
Da la orden de salvarme,
    porque tú eres mi roca y mi fortaleza. (Salmo 71:3)

¿Sobre qué construyes tu vida? ¿Quién es tu refugio en los momentos difíciles de ti vida? ¿En quién te escondes cuando la lucha diaria se vuelve violenta y tus enemigos toman ventaja?  Con facilidad decimos que Dios es nuestra roca y refugio, pero en la práctica no siempre es asi.  Tendemos a buscar respuestas propias, a hacer nuestra voluntad, a buscar consejo en quienes no son de la familia y enfrentar los problemas según nosotros entendemos la vida.

Nadie nos podrá darnos un mejor refugio que no sea Dios.  Ninguna filosofía por muy de moda que este, podrá ser lo suficientemente fuerte como para sostenernos en esta vida y mucho menos en la eternidad.  Solo Dios y su perfecta Palabra nos son roca firme para vivir seguros.  Sus brazos son el único lugar donde el maligno no podrá jamás tocarnos.  Solo en su amor somos saciados y sanados de todo mal.  Solo nuestro Padre es el único quien nos puede dar una vida segura en medio de un mundo lleno de violencia física, emocional espiritual y sexual. Sol Dios es el único que nos puede sostener en medio de toda lucha.    ¡Deja sin dudas, que Él sea tu roca eterna!