¿DE DONDE VIENE TU TRANQUILIDAD?
1-2 Sólo Dios me da tranquilidad,
sólo él puede salvarme;
sólo él me da su protección,
¡jamás seré derrotado! (Salmo 62:1)
sólo él puede salvarme;
sólo él me da su protección,
¡jamás seré derrotado! (Salmo 62:1)
Creemos que podemos encontrar tranquilidad cuando nuestra situación
económica sea satisfactoria. Cuando estemos al lado de la persona a la que
amamos, cuando nuestros sueños se puedan hacer realidad, cuando terminemos nuestros
estudios o cuando tengamos el trabajo que deseamos. Siempre buscamos la forma de conseguir una
vida tranquila, sin embargo siempre buscamos en el lugar equivocado.
Fuera de Dios no hay tranquilidad, ni paz, ni salvación. Cualquier cosa que nuestra alma anhele nos dará un bienestar momentáneo y después de
ello sin duda estaremos aburridos, desconsolados al darnos cuenta que erramos o
preocupados cuando lleguemos a la conclusión que tanto esfuerzo solo nos metió
en camisa de once varas. Fuera De Dios
la vida tranquila es momentánea, pues solo la que Él nos ofrece se prolonga
hasta la eternidad.
No busque tranquilidad fuera de Dios. Nada ni nadie te la dará. Solo Él tiene esa
bendición para ti.
¿¿
Comentarios
Publicar un comentario