DE VERDAD ¿NO SOMOS RESPONSABLES?
1-2 »Yo
soy el Dios todopoderoso;
tú me criticaste y desafiaste,
ahora respóndeme».
tú me criticaste y desafiaste,
ahora respóndeme».
3 Y Job le respondió:
4-5 «¿Qué podría responderte
si soy tan poca cosa?
Ya he hablado más de la cuenta,
y no voy a insistir.
Prefiero quedarme callado».
si soy tan poca cosa?
Ya he hablado más de la cuenta,
y no voy a insistir.
Prefiero quedarme callado».
6 Pero Dios le respondió a Job desde la tempestad, y
le dijo:
7 «¡Vamos a ver qué tan valiente eres!
Ahora yo voy a hablar,
y tú me vas a escuchar.
Ahora yo voy a hablar,
y tú me vas a escuchar.
8 »¿Tienes que acusarme de injusto
para probar que eres inocente? (Job 40:1-8)
para probar que eres inocente? (Job 40:1-8)
Poner la
responsabilidad sobre otros no nos exime de dar cuentas y culpar a otros del
error no nos hace mejores personas. La
auto justicia es el mayor engaño en el que podemos caer. Job había argumentado en contra de Dios y
Éste ahora le confronta con este hecho.
No podemos descansar
en nuestra propia justicia para argumentar en nuestro favor. No hay forma de construir una vida pretendiendo
que otros sean culpables y responsables.
El evitar ver nuestro error e imputarlo a otros no nos hace delante de
Dios justos. Ni tan siquiera personas maduras.
Pretender sentirnos mejor señalando los defectos de otros no nos lleva a
ser mejores personas. Mucho menos marginando,
señalando, violentando, usando. La única
forma de crecer y madurar realmente inicia en la cruz. En la aceptación del error propio, en el
aprendizaje y en la decisión de caminar por una ruta nueva y distinta: La ruta
de Dios.
Dejemos de buscar
nuestra propia justicia, porque con ella, nadie puede estar en pie delante de
Dios.
Comentarios
Publicar un comentario