NO PROFECO... SOLO DIOS NOS DEFIENDE

Dios me defenderá
como quien defiende a un amigo. (Job 16:21)

¿Quién te defiende del desamor, de la violencia intrafamiliar, de las conductas adictivas, de los problemas con tus hijos, de la pobreza, de la enfermedad?  Job se sintió violentado por los comentarios y acciones de sus amigos.  No basaba con lo que había pasado aun sus más cercanos le señalaban y en medio de ello descubrió que solo Dios podría defenderlo y sacarlo de donde estaba.

¿Quién te defiende hoy? ¿En quién buscas consuelo y fuerzas en medio de la prueba? ¿En quién te refugias?  Cualquier persona a nuestro lado quizá tenga disposición de proveernos palabras de consuelo, pero nada nos asegura que estarán siempre ahí y mucho menos que podrán defendernos de todo aquello que nos asecha.  Solo Dios es el único quien nos puede defender y darnos la victoria sobre la enfermedad, los problemas con los hijos, las situaciones difíciles en el matrimonio, el dolor de ser rechazados, olvidados, relegados o señalados.  Solo Dios no puede defender de la falta de empleo, de la pobreza, de la inseguridad social.  Solo Dios nos pude defender aun de nosotros mismos.

No busques ni esperes a nadie más,  si no  te refugias en Dios seguramente el dolor hará presa de tu vida y la insatisfacción gobernará tu vida.  El consuelo y la victoria sobre toda circunstancia solo está en Dios.