¿EN VERDAD SABES VIVIR?

 

 

Tú no ves las cosas
como nosotros las vemos,
⁵ ni vives los pocos años
que nos toca vivir; (Job 10:4-5)

Con mucha facilidad nos “casamos” con una manera de ver la vida.  Creemos que nuestras percepción de la realidad sin duda es la correcta o la mejor y por ello nos empeñamos en que todos se ajusten a lo que pretendemos lograr, sentir, creer, vivir, etc.  La realidad es que nuestra creencia sobre la vida en muchas áreas dista de ser la mejor para nosotros y mucho menos para los demás. Job llego a la comprensión de que la forma en que Dios veía la vida es diferente y perfecta que nuestra propia visión de la vida.

Caminamos por la vida pretendiendo saber qué hacer con ella y en ella.  Damos consejos, criticamos, censuramos las acciones de otros en un ataque de moralidad de esos que nos dan muy seguidos, señalamos la ruta que nuestra esposa o esposo deben seguir, les indicamos a nuestros hijos como caminar a lo largo de su vida, pero la realidad es que estamos tan inseguros de lo que decidimos para nosotros como los demás.  Creer o pretender creer que hacer en la vida no significa que en verdad lo sepamos. 

Hay gente sabia, que con su experiencia puede ser un buen faro para llegar a estados agradables en nuestra existencia, pero solo uno nos puede llevar a buen puerto: Dios.  Nadie más que Él nos puede conducir por nuestra vida y enseñar la forma correcta de amar, de enojarse, de ser feliz, de trabajar, de descansar, de ser padres, de ser esposos, de divertirnos, etc.  Solo Él y nadie más que Él nos puede mostrar la vía correcta para disfrutar una existencia que el invento, creo y nos regaló.

Dejemos de creer que sabemos.  Dejemos de señalar al de junto. Dejemos de fastidiar la vida de os que están cerca con nuestra soberbia, criticas, mal ánimo y rigidez.  Vayamos mejor a Dios y aprendemos de Él a vivir, porque hasta hoy nadie sabe vivir y disfrutar su existencia mejor que Él.