NOS HA SALVADO ¿ESTAMOS AGRADECIDOS?..




El cofre del pacto de Dios fue puesto en una carpa que David había preparado, y allí David le presentó a Dios muchas ofrendas de animales y de vegetales. Luego bendijo al pueblo en nombre de Dios, y a cada uno de los presentes le dio un pan de harina, uno de dátiles y otro de pasas. (1 Crónicas 16:1-3)

 

¿De qué manera expresamos nuestro agradecimiento a Dios? ¿Cuál es nuestra ofrenda de adoración a Dios cada día?  David tenía conciencia de que no podía presentarse delante de Dios con las manos vacías, sino que tenía que llevar ofrendas de agradecimiento y adoración para Aquel que le había dado todo.

¿Y nosotros? ¿Cuál debe ser nuestra mejor ofrenda a Dios?  Pablo en el nuevo testamento dice que la mejor ofrenda a Dios debe ser toda nuestra vida y que esta debe ser un sacrificio vivo para Él.  Es decir, nuestra mejor ofrenda para Dios somos nosotros mismos.  Nuestra forma de vida, la manera en la que hacemos todas y cada una de las actividades que desarrollamos cada día.  Cada acción, cada emoción y cada pensamiento debe ser una ofrenda para quien nos ha dado todo lo que somos y tenemos.  Si nuestras acciones están impregnadas de egoísmo, manipulación, orgullo y religiosidad, no podrán ser una ofrenda viva para El.

Fuimos creados para la alabanza de su gloria y nuestra prioridad debe ser vivir de tal forma que todo en nosotros sea adoración para nuestro Dios.  No se trata de ser “mochos” sino que la intención en todas nuestra acciones y emociones sean dar gracias por tanto que recibimos de su mano.

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