¿QUIENES SON TUS AMIGOS?

Manasés puso la imagen de la diosa Astarté en el templo de Dios, practicó la hechicería y la brujería, y se hizo amigo de los espiritistas y los brujos. También hizo quemar a su hijo como un sacrificio. Su comportamiento fue tan malo, que Dios se enojó mucho. (2 Reyes 21:6-7)

 

Hay quienes nos parecen personas maravillosas.  Nos gusta su plática, sus chistes y hasta su forma de pensar y ver la vida.  Sin embargo su influencia en nuestra vida tarde o temprano nos alejará de Dios.  Manasés codició la amistad de quienes él creyó eran buena influencia en su vida, sin embargo esas compañías los desviaron cada vez más de Él Dios de sus padres.

Nosotros nos relacionamos con tantas personas que muy pocas veces meditamos de qué manera éstas influyen en nuestra vida y si esa influencia es para bien.  Simplemente nos dejamos llevar por la corriente creyendo que sus consejos, comentarios y valores le darán un mejor sentido a nuestra vida.  Nadie que nos aleje de Dios, habrá sido puesto en nuestra vida por El.  Ninguna relación que nos aparte de Dios ha sido un regalo de Él para nuestra vida.  Nadie que nos incite a dejar de caminar con Dios es la respuesta a una oración.

Manasés sufrió el enojo de Dios y por lo tanto la infelicidad en la vida. Sus hijos fueron esclavos y su nación vivió en sufrimiento mucho años porque él no supo escoger bien aquellos con quienes se relacionó y fueron influencia en su vida.  No hagamos lo mismo y cuidemos bien a quienes dejamos entrar en nuestra vida.