BENDECIR. NO HERIR


BENDECIR, NO HERIR
Dios nos bendice para bendecir, no para causar dolor.  Esta es una verdad que olvidamos con mucha facilidad.  El hombre de la historia recibió la bendición se recibir autoridad sobre un reino y aunque el se consideraba incapaz de hacer algo sucio, en realidad termino haciéndolo.  Mato a su rey y tiempo después violento naciones.
Nosotros podríamos decir: “bueno yo no seré rey, presidente o alcalde”  Si, quizá eso nunca pase, pero si somos padres, esposo, jefes, supervisores de tareas sobre compañeros de trabajo, etc.  Somos personas que recibimos bendiciones de parte de Dios pero olvidamos que somos bendecidos para bendecir.  Dios nos ha bendecido con una pareja y no para enseñorearnos de ella o lastimarle con palabra hirientes, infidelidad, verdades a medias, ocultando nuestro paradero, etc.  Dios nos bendijo con hijos y no para sentirnos más que ellos, ni para golpearlos, ni para hacerlos sentir mal con nuestras palabras.  Dios no dio autoridad en nuestro trabajo y no para que aumentemos estima haciendo sentir mal a otros por sus errores, ni para desquitarnos de nuestra frustraciones o dolores ocasionados en casa.  Dios nos bendice para bendecir no para herir.
Consideremos nuestro proceder y hagamos ajustes en donde se haga necesario y hagamos de la bendición de Dios en nuestra vida, una bendición para quienes nos rodean.

Comentarios

Entradas populares