CONFIEMOS, ESTAMOS BLINDADOS

Entonces el rey de Siria ordenó:

—Vayan y averigüen dónde está Eliseo, para mandar a capturarlo.

Cuando le avisaron al rey que Eliseo estaba en Dotán, ¹⁴ envió allí carros, caballos y un gran ejército. Llegaron de noche y rodearon el pueblo.

¹⁵ A la mañana siguiente, el sirviente del profeta se despertó temprano. Cuando salió afuera y vio un ejército con carros y caballos que rodeaba la ciudad, le dijo a Eliseo:

—¡Maestro! ¿Qué vamos a hacer?

¹⁶ Eliseo le respondió:

—No tengas miedo. ¡Son más los que están con nosotros que los que están con ellos!

¹⁷ Luego Eliseo oró y dijo: «Dios, te ruego que lo ayudes a darse cuenta de lo que sucede». Entonces Dios ayudó al sirviente, y éste vio que la montaña estaba llena de caballos y carros de fuego que rodeaban a Eliseo. (2 Reyes 6:13-17).

¡No buscamos quien nos diga que va a pasar porque Dios está de nuestro lado!  Mientras que el Rey de siria estaba estresado porque sus planes no salían, Eliseo dormía tranquilo aun y a pesar de que estaba aparentemente rodeado por el enemigo.

Nosotros sufrimos de ansiedad y estrés por problemas de salud, trabajo, familiares, matrimoniales, de crianza de los hijos o seguridad, porque no sabemos ni vemos que Dios está de nuestro lado.  Vemos las dificultades de la vida como algo que nos controla y no como las oportunidades de Dios para enseñarnos a vivir confiando en El.  El enemigo de nuestras almas podrá mostrarnos un camino inseguro, podrá enviar a los suyos para atacar nuestra economía, a nuestros hijos, a nuestro matrimonio, a nuestro trabajo, pero sus intentos serán estériles si vivimos confiados en la seguridad que solo Dios da.

Cuando el sirviente de Eliseo vio las cosas como Dios las ve, se dio cuenta  que la victoria estaba segura a favor de ellos, pues el ejercito de Dios tenía rodeado a quienes pretendían hacerles mal a ellos.  Así es hoy.  Quien pretende nuestro mal está rodeado pues Dios acampa alrededor nuestro y nos defiende.  Nuestra es ya la victoria.