VALENTIA Y OBEDIENCIA


«Tarde o temprano, la muerte nos llega a todos, y a mí me falta poco para morir. Sé valiente y compórtate como hombre.
Obedece todos los mandamientos de nuestro Dios, y todas las leyes que nos dio por medio de Moisés. Si haces esto, te va a ir bien en todo lo que hagas y en cualquier lugar a donde vayas. Dios prometió que el trono de Israel será siempre ocupado por mis descendientes, si ellos se portan bien y le son completamente fieles. Así que pórtate bien para que Dios cumpla su promesa (1 Reyes 2:1-4)
Hay dos cosas que sin duda nos darán la oportunidad de tener una vida satisfactoria: Ser Valientes y Obedecer a Dios.  Dios nos ha provisto de una vida llena de bendiciones y bienestar sin embargo nosotros lo echamos a perder cuando vivimos en temor y lejos de la dirección del Padre.
David aconseja a su hijo que si en verdad quiere que las cosas salgan como deben suceder y pueda con ello construir una vida satisfactoria, sin duda tendrá que ser valiente para enfrentar los conflictos diarios y obedecer a Dios para enfrentarlos de la manera correcta.  Muchos son valiente pero en su propia opinión y fallan, otros consideran la verdad de Dios pero son medrosos y se quedan quietos. ¡No!  Deben ser las dos cosas juntas.  Valentía y obediencia deben ir de la mano para ver la obra de Dios en nuestra vida.
Seamos valientes y obedezcamos a nuestro Padre en todo y sin duda alguna veremos sus milagros suceder en nuestro alrededor cada día.

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