CHARLANDO CON DIOS


Moisés colocó una carpa fuera del campamento, y la llamó Carpa comunitaria. Si alguno quería hablar con Dios, salía del campamento y entraba en la carpa. Y cuando Moisés entraba en ella, todos se quedaban de pie junto a su propia tienda de campaña y lo seguían con la mirada hasta verlo entrar en la carpa. 9-10 Tan pronto como Moisés entraba, la columna de nube bajaba y se colocaba a la entrada; entonces todos se arrodillaban a la entrada de su propia tienda de campaña, mientras Dios hablaba con Moisés.
11 Siempre que Moisés entraba en la Carpa comunitaria, hablaba con Dios personalmente, como si hablara con un amigo. Después, Moisés regresaba al campamento. Pero Josué, que era su ayudante, nunca se alejaba de la carpa. (Ex.33:7-11).

Vivimos en la era de las comunicaciones.  Hablamos con quienes están cercanos a nosotros y lo hacemos también con aquellos que son distantes, y lo hacemos a través de una teléfono fijo, un celular, por medio de la red, por facebook, whtasapp, instagram, tumblr, wechat, talk, etc.  Cualquiera que fuse el caso, siempre estamos comunicando con alguien.  Sin embargo, con quien más tenemos que hablar, Dios, le ignoramos.

Dios le dijo a Moisés que hiciera una carpa para que ahí pudiera charlar con él y con el pueblo. Y era ahí donde Moisés hablaba personalmente con Dios como lo hacía con sus amigos.  Hablar con Dios para Moisés no era un ritual religioso, sino la oportunidad de conocerle, de intimar con Él, de establecer lazos afectivos fuertes entre los dos y pasar tiempo juntos disfrutando el momento.  Hoy nosotros debemos aprender lo mismo.  No hablamos con Dios solo cuando vamos los domingos a la reunión de la iglesia. Debemos aprender a dedicar tiempo a Dios como lo hacemos con nuestros contactos de las redes sociales. Debemos aprender a reír con Dios, a charla de lo que nos resulta importante, de nuestros dolores y triunfos, de nuestros retos y anhelos.  No se trata de repetir lo que alguien un día oro, se trata de hablar lo que está en nuestro corazón y poder ser amigos cercanos de Él.

Seamos cercanos a Dios y dediquémosle tiempo para compartir, reír, escuchar música, contarle nuestras cosas y escucharle decir lo que para él es importante y desea para nosotros.  Hablemos con Dios cada día como lo hacemos con “nuestros amigos”

https://www.youtube.com/watch?v=VeNa4tRgzdA&list=PL45A49593A916AEBE

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