RESPONSABLES

¿Qué tienes en la mano? –pregunto el Señor. (Ex. 5:2)

Vivir con la esperanza de que no tendremos que hacer esfuerzos o poner dedicación a las cosas que debemos hacer es un absurdo.  Tener fe en Dios no significar olvidarse de los compromisos y evadir el esfuerzo que nos corresponde.  A veces creemos que es obligación de Dios hacer todo el trabajo y le transferimos a Él todo el compromiso de nuestra existencia y tal cosa no es un valor cristiano.

Cuando Moisés argumentaba delante de Dios sobre la tarea recibida y sus capacidades a fin de evadir el compromiso, Dios le dijo, ¿Qué tienes en la mano?  Esta pregunta no nos deja mas que pensar en una sola cosa: Dios nos llama a vivir, a servir, a educarnos, a formar familia, a amar, a estudiar, a desear, a divertirnos, etc. Y para ello nos da su compañía, cuidado y gracia pero no recuerda que tenemos nosotros el compromiso de hacer frente a cada demanda de la vida con aquello que está a nuestro alcance.  No recuerda que Él jamás nos abandonará pero que es nuestro deber vivir y hacerlo lo mejor posible.  Los milagros no vienen a la vida de aquellos que evaden vivir y ser responsables por ello.

Dios hoy te dice: ¿Qué tienes en tu mano? Para que con ello enfrentes tus obligaciones laborales, la demanda de tus hijos por ser padre, madre o ambos, el des amor y rechazo de quienes no te valoran, los problemas económicos, la enfermedad, etc.  No evites ser responsable de tu vi.