¿DE DONDE TOMAS VIDA?

Por lo que a mí toca,

siempre pongo mi confianza
en el gran amor de Dios;
yo, en su presencia, cobro vida
como árbol cargado de frutos. (Salmo 52:8 VLA)
Vivir es mucho más que respirar.  Vivir tiene que ver mucho mas con cuestiones emocionales y eternas que con el hecho mismo de que nuestro corazón lata.  En algunos días sentimos que nuestro ánimo esta por los suelo y pareciera que no estamos vivos.  A veces la depresión, otras más el sentimiento de desesperanza, aun los celos o la envidia o el enojo, hacen que viviéramos sin vida.  Buscamos sensaciones que nos hagan sentirnos vivos sin embargo fracasamos en el intento.  En el mejor de los casos nos sentimos bien un momento y después regresamos al engaño de que todo está “ok”
El salmista dice “solo” en tu presencia “cobro” vida.  Esta es una frase muy dura, porque aunque marca la ruta correcta también nos muestra el terrible error en el que vivimos.  Buscamos vida en las sensaciones de amor, éxito, afecto fraternal, logro profesional, poder económico, logros académicos, sanciones físicas, etc. Para el salmista nada de esto le genero la sensación de estar vivo.  Solo estar en compañía de Dios le da vida.  No se trata de ser parte de actos religiosos, actividades de la iglesia, o ritos personales diarios que tienen que ver con Él.  No.  Es más bien vivir con Él, caminar con su compañía, aprender de su forma de vida, de sus valores y creencias para integrarlos a nuestra vida.  Se trata de,  como decía el apóstol Pablo, el viva a través de nosotros.
No hay forma de experimentar una vida plena fuera de una verdadera amistad con Dios.  Todo lo demás es religión, amargura, dolor y tristeza.   Nada, absolutamente nada nos hará sentirnos vivos fuera de ser cercanos a Dios.
Dejemos de buscar vida en donde no hay.  Solo en Dios encontraremos la experiencia de vida que estamos buscando.

Comentarios

Entradas populares