¿SEGUIMOS A JESUS?

Jesús dijo "… si alguien quiere venir en pos de mi…" Esta solo frase en si misma tiene un sin número de consideraciones que debemos revisar para tener una conciencia clara de la ruta que seguimos.

IMPLICACION 1: ¿QUEREMOS SEGUIR A JESÚS?
A lo largo de la vida sentimos el deseo de seguir muchas cosas. Una carrera académica, un chico o una chica según sea el caso, el crecimiento profesional y económico, etc. Sacrificamos descanso, familia, amigos, hijos, con tal de ir en pos de lo que deseamos. Sin embargo no se ve lo mismo cuando hablamos de seguir a Jesús. Nos pesa asistir a las reuniones de la iglesia, le dedicamos poco tiempo de calidad, charlamos poco con El, casi no le adoramos, no estamos dispuestos a sacrificar algunas de nuestros asuntos con tal de ir tras El. Si lo vemos de este modo, tendríamos que decir que nuestro deseo por El es bastante pobre. Quizá por ello no es tan complicado expresarle con hechos el amor que decimos tenerle a través de las palabras.

IMPLICACION 2: SEGUIR A JESUS NO ES SOLO IR LOS DOMINGOS A LA REUNION.
Muchas veces reducimos el acto de seguir a Jesús al simple hecho de ir cada domingo a la iglesia. Ello es parte pero no es la única. Seguir a Jesús es una acción diaria. Caminar con Jesús no es una gracia de "a ratitos" sino de "todo momento" Caminamos con él en casa, en el colegio, en el trabajo, al ir al parque o al centro comercial. Cuando reímos o lloramos, cuando nos sentimos animados o cuando estamos deprimidos, etc. Caminar con Jesús no es un rito religioso sino un estilo de vida.

IMPLICACION 3: SEGUIR A JESUS ES CAMINAR EN LA DIRECCION EN LA QUE EL VA
No se puede caminar junto a Jesús sin comprometernos a ir en la misma dirección que El. Es decir no podemos decir que vamos a su lado si nuestra forma de vida nada tiene que ver con su forma de vida. Seguir a Jesús y vivir fuera de los valores del Reino no es posible. Es fácil desviarnos en este rubro. En parte porque el mensaje de la iglesia se abarato en los últimos años. El pragmatismo, el secularismo y el postmodernismo han pasado una factura muy alta a la iglesia, pero quizá la más alta es el hecho de que hoy ser creyente y discípulo se ha reducido a asistir a programas y actividades que pretende generar creyentes y líderes instantáneos. Caminar con Jesús lleva toda la vida. Es la acción de priorizar la relación intima con El por encima de cualquier otra cosa.

IMPLICACION 4: SEGUIR A JESÚS ES INTEGRAR A NUESTRA PERSONA SU FORMA DE VIDA
No se trata de repetir doctrina, o de recitar postulados y mucho menos se trata de asistir a una actividad religiosa que será el medio por el cual podremos llegar a ser lo que El espera. No. El reto es permitir que el trate con nuestro carácter, nuestros valores y nuestras creencias. Decir que caminamos con Jesús y no haya evidencias de madurez, de auto control de las emociones (dominio propio), cambio de nuestra escala de valores, etc. solo dejaría ver simulación o adecuación a la cultura de la congregación a la que asistimos, pero más nada.

Yo quiero caminar realmente con Jesús. Quiero que su vida absorba la mía y sea él quien viva en mí y a través de mí. Sé que ello me llevara a depender cada día de su gracia y será así hasta el final de mi vida. Peor no me corre prisa, pues se también que ellos será la mejor experiencia que podre tener y en verdad la quiero disfrutar y no pasar por ella de prisa. En verdad quiero aprender a desear caminar con El ¿y tú?